El fin de semana siguiente a la celebración religiosa de Corpus Christi (en 2024, el jueves 30 de mayo), la localidad pontevedresa de Puenteareas realiza su celebración más representativa y vistosa, un espectáculo de decoraciones florales que conmemora ese señalado día de la agenda cristiana. El Día de Corpus en Puenteareas ya fue declarado Fiesta de Interés Turístico el año 1968, un título ampliado en 2009 a Fiesta de Interés Turístico Internacional, al que se añade en 2024 el reconocimiento como Bien de Interés Cultural en la categoría de Patrimonio Inmaterial por la Xunta de Galicia.
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UNA FESTIVIDAD DEL CORPUS COLORIDA Y PERFUMADA
Corpus Christi se celebra en el calendario católico 60 días después del Domingo de Ramos. El fin de semana siguiente (en 2024, 1 y 2 de junio), los vecinos de Puenteareas se reúnen la noche del sábado al domingo para seguir con la tradición local centenaria de confeccionar alfombras y ornamentos florales. Semanas antes, en el pueblo ya han empezado a preparar los pétalos de flores y hojas que llenarán de colorido y aroma las calles y monumentos de la localidad. Cuando al amanecer del domingo los tapices están acabados, permanecen intactos en las calles hasta servir de bellas pasarelas a la procesión de Corpus del domingo por la mañana.
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TRADICIÓN CENTENARIA
Si el origen de esta celebración está documentado en Europa desde el siglo XII, en Ponteareas se tienen indicios desde la Edad Media también, aunque fue en el siglo XIX (el primer registro data de 1857) cuando se formaliza la tradición de tapizar el pueblo con alfombras de pétalos sobre los que desfila la procesión de Corpus. La decoración floral que surge de la noche al día en el pueblo es una demostración de devoción religiosa, además de una muestra de afecto a las tradiciones de este pueblo gallego y un símbolo del esfuerzo comunitario de sus protagonistas. En época moderna, la belleza de las alfombras florales de esta localidad de Pontevedra contó con el reconocimiento de dos papas que se acercaron a verlas: Juan Pablo II en 1983 y Benedicto XVI en el Año Jacobeo de 2010.
La costumbre de adornar las calles por el día de Corpus con flores hace que el pueblo esté hermanado con otros lugares de España que siguen la misma tradición. Sobresale las procesión de Corpus en Berga (provincia de Barcelona), declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco. Las de Béjar, Toledo son junto a la propia Puenteareas Fiestas de Interés Turístico Internacional. Y las declaradas de Interés Turístico Nacional son La Orotava en Tenerife, la sevillana de La Puebla del Río, la de Peñalsordo en Badajoz, la barcelonesa de Sitges, la de Elche de la SIerra en Albacete y la gaditana de Zahara de la Sierra.
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LA NOCHE DE LOS PORTALES
Aunque la procesión de Corpus se realiza el domingo por la mañana, muchos visitantes acuden al pueblo para ver en vivo durante la noche del sábado, cómo desde niños a abuelos confeccionan las alfombras, usando pétalos de hortensias, mirtos, mimosas, hinojos o rosas… Es el momento culminante, aunque en realidad la preparación habrá comenzado meses antes cuando los habitantes se reúnen para decidir los motivos ornamentales y empezar a deshojar y acumular pétalos de flores. Todos se reúnen en los llamados «Portales de Corpus», una veintena de espacios que abren sus puertas cedidos por sus propietarios al Ayuntamiento.
OBRAS DE ARTE EFÍMERO
Las calles de Ponteareas amanecen el domingo de Corpus tapizadas de alfombras artesanales que sorprenden por su tamaño, belleza, aromas y colorido. Las alfombras creadas están pensadas para durar solo unas horas hasta ser diluidas por la procesión del Santísimo Sacramento de la mañana, lo que a su vez simboliza «lo transitorio de la vida». Estos tapices fugaces se extienden a lo largo de 1,5 kilómetros por las calles del centro antiguo de Ponteareas.
DOMINGO DE PROCESIÓN
El día de la procesión, la Custodia desfila por el pueblo, acompañada de autoridades, mujeres vestidas tradicionalmente con mantilla blanca, niñas y niños de primera comunión y todos acompañados por la música de bandas. En algunos puntos la comitiva se detiene bajo una lluvia de pétalos que los vecinos les lanzan, llenando el aire de aroma y el suelo de aún más color. En el pueblo pontevedrés, los vecinos se preparan con meses de antelación para repartirse las calles y concretar los diseños que las adornarán. Se utilizan flores, hojas, aserrín teñido y otros elementos orgánicos. Al inicio simplemente cubrían el pavimento, pero con el tiempo se han convertido en obras de arte florales. Los tapices recrean escenas religiosas, formas geométrica y elementos naturales.
Cuando acaba la procesión las alfombras se desvanecen, pero no el trabajo de los vecinos de Ponteareas se ve recompensado cada año en las Medallas de Plata que se otorgan para valorar el trabajo anónimo y altruista de las decenas de personas. Como novedad, en 2024 se presenta la primera edición del Concurso de Balcones Floridos que incluye una mención especial a elegir entre las distintas parroquias que engloba el municipio.
EL ORIGEN DE LA FIESTA: TODO POR UNA MUJER
La idea de salir a procesar en las calles el día de Corpus Christi se remonta al año 1208 cuando una religiosa belga, Juliana de Fosses, impulsó la iniciativa de celebrar «el Cuerpo y la Sangre de Cristo presentes en la Eucaristía» fuera de las iglesias. La monja, hoy santificada, pasó a la historia por dedicar gran parte de su vida a promover la devoción del Corpus Christi. Lamentablemente, nueve años después de su muerte, en 1246, el papa Urbano IV oficializó la propuesta y estableció celebrar esta fiesta el jueves siguiente a la octava de Pentecostés. La primera procesión de Corpus se realizó el año 1247, organizada por la diócesis de la ciudad belga de Lieja.
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