Si tuviéramos la oportunidad de contemplarlos desde el espacio, los montes Dolomitas probablemente nos parecerían un laberinto perforado por excavadores erráticos. Efectivamente, decenas de valles surcan esta cadena montañosa del norte de Italia, repartida entre las regiones de Trentino Alto Adigio, Véneto y Friuli Venezia Giulia.
Las moles rocosas que sobresalen son macizos independientes unos de otros, cada uno con sus propios picos, senderos, vías ferratas, bosques… incluso estaciones de esquí. Y en su base tienen los mejores espejos naturales: lagos de aguas cristalinas en los que, además de las cumbres, se reflejan los pueblos asentados en sus orillas.
La mayoría de estas localidades son excelentes bases para recorrer varios valles pues disponen de una amplia gama de alojamientos, restaurantes y empresas que ofrecen actividades diversas, como rutas guiadas de senderismo, escalada o de vías ferratas.
La sorpresa de Aragón
La localidad que sintetiza la provincia de Teruel en solo 650 metros
Esta es la distancia que separa el castillo de la plaza de España de Alcañiz, un paseo que preludia las sorpresas que guarda este lugar.
LAGO DE BRAIES
Es el más famoso y el de mayor tamaño de los lagos naturales de las Dolomitas. Se localiza en la provincia de Bolzano/Bozen y su nombre alemán es Pragser Wildsee. Por su situación dentro del Parque Natural Fanes-Senes-Braies, este lago es uno de los más populares entre senderistas y escaladores.
Se accede desde las localidades de Toblach/Dobbiaco y Niederdorf/Villabassa, pero hay que tener en cuenta que, de julio a septiembre, es obligatorio reservar plaza en el aparcamiento del parque o el viaje en autobús hasta la entrada de la reserva.
Una vez allí, se puede optar por dar la vuelta al lago siguiendo el sendero de 3,6 km o bien dar un paseo en barca y contemplar la montaña del Croda del Becco (2.810 m) desde el agua.
Murallas y luz
Los castillos legendarios de Cádiz
Esta provincia demuestra que fue siempre objeto de deseo mediante unas fortalezas transformadas en monumentos imprescindibles.
LAGO MISURINA
Además de bonito, este lago puede ser una de las etapas previas de camino a las impresionantes Tres Cimas de Lavaredo, un conjunto de tres picos que se alzan como un tridente, que son fáciles de rodear por un sendero señalizado al que se accede desde el aparcamiento del lago Antorno.
El lago Misurina también se conoce como la Perla di Cadore, el pueblo situado a su orilla. Las vistas son espléndidas: alrededor se levantan el Piz Popena, el Monte Piana y al fondo las Tres Cimas de Lavaredo.
LAGO DE MIS
El Parque Nacional de los Dolomiti Bellunesi guarda uno de los lagos más mencionados en las listas de los más bonitos de los Alpes: el lago de Mis.
Es una cuenca artificial pero preciosa por el paisaje que congrega a su alrededor, integrado en un valle enmarcado por altas montañas forradas de bosques, con cascadas y pozas naturales.
Se permite el baño en una pequeña parte del lago. Cerca de ahí, a solo 3 km y con una zona gratuita para aparcar, se hallan las pozas del Cadini del Brenton, un rincón perfecto para pasar un día caluroso de verano, aunque no está permitido bañarse.
Se accede desde Castelluccio di Norcia, en la provincia de Belluno.
Lago de Carezza
También conocido por su nombre tirolés, Karersee, debe su poético apodo lago del Arcoíris a una leyenda que tiene tres protagonistas: la bella ninfa Ondina, el mago Masare enamorado de ella y la bruja Langwerda que los engaña a los dos.
Un sendero lo rodea en apenas 30 minutos, pasa por un puente tibetano y regala vistas impagables de la cordillera de Latemar. Lo que más sorprende de este lago es el intenso color azul turquesa que adquieren sus aguas en los días más soleados.
lago fedaia
El lago Fedaia se extiende al pie de la Marmolada, la inmensa mole de roca y hielo que hace las delicias de esquiadores en invierno y de escaladores de vías ferratas en verano. Además, conserva túneles y trincheras de la Primera Guerra Mundial que explican muy gráficamente la penosa vida de los soldados en el frente italiano-austriaco de las Dolomitas y las batallas de desgaste y bombardeos que allí se libraron.
Situado a situado a 2.054 m, el Fedaia era un lago natural hasta que fue represado. A la presa Controdiga di Maria al Lago se puede llegar en coche, pero al pequeño lago natural, al pie de la Marmolada, solo se accede a pie. Una de las mejores vistas del Fedaia se consiguen desde el mirador de la Marmolada, al que se puede acceder en una ruta de 7 km desde el Paso Pordoi.
El tesoro alpino de las Dolomitas
Esta región del norte de Italia es una de las más especiales de los Alpes por su biodiversidad, pero sobre todo por la singular roca dolomía, descubierta por el naturalista francés Déodat de Dolomieu. Y también por su cultura, repartida entre la italiana y la austriaca, sin olvidar la cultura local, la ladina, que aún conserva la lengua y las tradiciones en los valles de Gardena, Badia y Fassa.
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