LA MOZAIRA (Alboraya, València)
Camino Del Magistre, 50. Alboraya.
A tan solo unos minutos de València en coche, escondida entre la huerta valenciana y los campos de chufa, se encuentra una antigua alquería reconvertida en un hotel con encanto. Conocida antes como Alquería Torres, esta residencia centenaria fue recuperada por José Polo —Pepe para los amigos— y su mujer. Su apellido no necesita presentación, ya que abandera la aclamada fábrica de fartons, líder indiscutible de esta receta original de la terreta. Su techo a dos aguas, su fachada en tonos claros y su jardín mediterráneo representa ese “lujo silencioso” tan escuchado últimamente. Una elegancia práctica y sin pretensiones, pero sin desperdiciar detalle.
Limoneros y buganvillas, una piscina de agua salada, un exquisito restaurante con terraza exterior y un patio, en el que antes aparcaban los carruajes, son algunos de sus grandes atractivos. En su interior aguardan once habitaciones con nombre de mujer, “todas mujeres de la familia: madres, tías, hermanas…”, explica Polo. Cada una con su personalidad, todas diferentes entre sí. Un salón principal y una sala de lectura, en la segunda planta, dan un respiro entre dormitorio y dormitorio. Con unas vistas al horizonte (de Alboraya), son esta clase de zonas comunes las que aportan ese ambiente acogedor, de hogar.
EL PARADOR DE EL SALER (El Saler, València)
Avenida los Pinares, 151. El Saler.
No es necesario alejarse mucho de la ciudad del Túria para encontrar un resquicio de paz y naturaleza. De hecho, solo hace falta recorrer 18 kilómetros. Allí, en una isla entre el mar Mediterráneo y el Parque Natural de la Albufera se alza El Parador de El Saler, construido en 1966. Rodeado de dunas y un vasto pinar, se halla este oasis de cinco estrellas con spa, piscina exterior y dos restaurantes, donde disfrutar de la auténtica cocina mediterránea y unas vistas envidiables.
Aunque, sin duda, una de sus grandes joyas es su campo de golf, considerado uno de los mejores de Europa. Ideado por Javier Arana que, además de regatista olímpico, es recordado por sus célebres diseños que copan los principales rankings mundiales. Y a pesar de que las palabras “golf” y “sostenibilidad” no suelen ir de la mano, en este caso no es así. Recientemente condecorado con el premio al mejor producto de economía circular, su filosofía se basa en la conservación de su delicado ecosistema. Un entorno que cuenta con más de 300 clases de aves, así como especies en peligro de extinción como la tortuga mediterránea, el chorlitejo patinegro o las tortugas marinas, que asentaron hace unos años su nido muy cerca del parador. Junto a la ONG Xaloc han desarrollado la iniciativa Campamento Tortuga para velar día y noche por estas pequeñas criaturas.
VILASIRA ROOMS & WINES (Venta del Moro, València)
CV-475, 8, Venta del Moro.
«Nadie inventa nada porque todo está escrito en la naturaleza. La originalidad consiste en volver al origen». Con esta cita del arquitecto Antonio Gaudí, Vilasira establece los cimientos de su estilo de vida. Una finca de cuatro hectáreas ubicada en el interior de la provincia de València, a una hora de la capital. A las puertas del Parque Natural de la Hoces del Cabriel y envuelto entre montañas y viñedos, descansa este alojamiento rural dividido en tres módulos donde los huéspedes pueden escoger entre habitaciones, suites y villas privadas. Un entorno para conectar con la naturaleza y descansar —o como lo llaman Vilasira: “Feep Concept”, resultado de combinar las palabras Feel + Sleep—.
Un paraje donde practicar senderismo, ciclismo o, simplemente, pasear y observar el entorno; además de poder recargar pilas en su piscina o con sus masajes terapéuticos y sus tratamientos con vino. Una escapada completa que une el agroturismo con el enoturismo, gracias a su bodega del siglo XIX y a su galería de Trullos subterráneos reconvertida en salas privadas donde catar su amplia selección de vinos.
LA ALQUERÍA DE VILCHES (Sueca, València)
CV502) Ctra. Nazaret – Oliva, Km 27.3 – 46419, Mareny de Vilches.
Entre las localidades de Sueca y Cullera, se ubica esta antigua casa de campo transformada en un refugio que invita al bienestar. Un equilibrio entre el encanto rústico de las clásicas alquerías de la costa valenciana con un gran trabajo de diseño y restauración. ¿El resultado? Una elegancia minimalista típicamente mediterránea, en tonos neutros, que culmina con la joya de la corona: su patio interior y su piscina de aguas turquesas. Sin lugar a dudas, la zona más fotografiada del hotel.
Dos plantas que albergan un total de doce habitaciones —siete de ellas dan al precioso patio interior—, y donde también se puede disfrutar de un circuito de spa con sauna, hidromasaje y masajes para relajarse. Todo ello rodeado de los arrozales tan representativos de la zona, algunas de las mejores playas de la provincia de València y el Parque Natural de la Albufera. Pura evasión a menos de una hora de la capital.
LA GALIANA HOTEL RESORT (Alzira, València)
Carretera Alzira-Tabernes de la Valldigna CV-50, Km 11.
Lejos del ruido de la urbe, a tan solo 55 kilómetros, se alza este resort de cuatro estrellas y solo apto para adultos, que aúna la tranquilidad de la naturaleza con la modernidad y la exclusividad más absolutas. Su entorno es uno de sus lujos más preciados: un valle de 200 hectáreas de bosque mediterráneo en el corazón del valle de Aguas Vivas.
Leer plácidamente un libro mientras ves las montañas desde la ventana de tu habitación; poner el móvil en modo avión, mientras disfrutas de una sesión de hidroterapia en su zona de aguas o alivias tensiones con un masaje geotermal con piedras volcánicas o jugar al golf en uno de los mejores campos de España. 18 hoyos en el mejor campo de golf sostenible internacional de 2016, “un galardón considerado como los ‘Oscar del Golf’”, cuentan desde el hotel. Un complejo diseñado para el ocio y el relax en plena Ribera valenciana.
MASQI THE ENERGY HOUSE (Banyeres de Mariola, Alicante)
Camino de la Mallaeta, s/n 03450 Banyeres de Mariola.
En el interior de Alicante, en pleno Parque Natural de la Sierra de Mariola, se esconde una antigua masía del siglo XIX restaurada y reconvertida en un hotel boutique “transformador” y holístico. Un retiro al que acudir en busca de bienestar, gracias a su protocolo de masajes ayurvédicos, terapias energéticas, tratamientos faciales y corporales, sesiones de yoga y meditación. Un viaje que cumple diez años desde que, Sonia Ferre, decidiera abrirlo, fruto de su propia salida de un mundo laboral frenético y estresante y de una crisis personal. Desde 2014, su objetivo ha sido “compartir aquellas disciplinas que me habían ayudado a ser más feliz, a encontrar el sentido de mi vida”, cuenta su fundadora.
Más allá de unas meras vacaciones, aquí el objetivo es abandonar la ansiedad y aprender a reconectar, pero sobre todo volver a casa con otra filosofía: una vida más plena, consciente y mejor. Este centro wellness cuenta con una decena de programas que se adaptan a las necesidades de cada persona. Desde aliviar el estrés y dormir mejor; depurar el cuerpo (y la mente) con una experiencia detox con menús y terapias personalizadas o, su nueva incorporación, el programa “Energía vital”, nacido de la inquietud de muchos de sus clientes sobre cómo gestionar la baja energía y altos índices de estrés, así como la falta de propósito e ilusión. Aunque uno de sus formatos más populars —sobre todo si no dispone de mucho tiempo— es la opción de pasar un día completo sin necesidad de estar hospedado: yoga en su domo acristalado, un desayuno energizante, masajes antiestrés, piscina y una comida bio gourmet en su restaurante.
THE ADELANTE HOUSE (Jávea, Alicante)
Calle Lluca, 41. Jávea.
Jávea —Xàbia para los locales— es, sin duda, una de las joyas de la Costa Blanca. Un secreto a voces que reúne todo lo que se busca en el Mediterráneo: calas de aguas cristalinas, un casco histórico lleno de encanto, naturaleza y buena gastronomía. Y, por si fuera poco, existen lugares como The Adelante House, una exclusiva villa para recuperar la energía y volver a casa como nuevo. Diseñada por la ya conocida interiorista Jessica Bataille, de padre holandés, madre libanesa y asentada en la localidad alicantina, ha sabido capturar como nadie la esencia y el paisaje mediterráneo.
Fibras naturales como lino y rafia, tonos neutros combinados con coloridos estampados y un uso extraordinario de la luz son algunos de los elementos característicos de este reducto de paz. Un total de ocho elegantes dormitorios y conserjería propia, donde aseguran la privacidad total —ya que entre sus huéspedes destacan celebrities del panorama nacional como Blanca Suárez—. Aunque su atractivo principal (y el más fotografiado) es su piscina central, rodeada de sombrillas y zonas chill out para pegarse un chapuzón y rezar porque los días no pasen.